| Año | Revista | FI | Tema | Autores | Volumen/Páginas | Descargar |
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| 2017 | Chest | 6,147 | Asma grave no controlada | Hunt EB, Ward C, Power S, Sullivan A, Pearson JP, Lapthorne S, et al. | 151(6): 1272-8 |
BACKGROUND: Many people with asthma remain suboptimally controlled despite current treatments. Reasons include comorbidities that could aggravate asthma, including gastroesophageal reflux. We aimed to investigate whether aspiration occurs in patients with asthma and, if so, does it correlate with asthma control?
METHODS: Patients had Asthma Control Questionnaire 7 (ACQ-7), fractional exhaled nitric oxide, and spirometry performed to characterize their level of asthma control. Barium swallow with provocation was performed to assess for predisposition to aspiration. Patients underwent bronchoscopic investigation, with BAL pepsin measured as a marker of aspiration.
RESULTS: Seventy-eight patients stratified by disease severity (Global Initiative for Asthma) into mild (35.8%), moderate (21.7%) and severe (42.3%) were studied. Pepsin was detectable in BAL in 46/78 (58.9%). There were no differences between pepsin levels in patients with different disease severity. Furthermore, no significant associations were seen between pepsin level and measures of asthma control, FEV1, ACQ-7 or exacerbation frequency. Similarly no associations were found with adjustments for smoking history, BMI, proton pump inhibitor use, eosinophil count or IgE. When stratified into eosinophilic or neutrophilic asthmatic populations on the basis of BAL, there was no relationship to detected pepsin concentrations. A positive barium swallow (seen in 33/60 patients) did not correlate with BAL pepsin level and we found no significant association between barium swallow result and ACQ-7, Global Initiative for Asthma, exacerbation frequency or FEV1 using either univariate or multivariate analyses.
CONCLUSIONS: This study suggests that the importance of aspiration on current asthma symptom control and exacerbation rate may be overstated. However, this study did not address the role of aspiration and future risk of exacerbation.
ANTECEDENTES: muchas personas con asma permanecen bajo control subóptimo a pesar de los tratamientos actuales. Las razones incluyen comorbilidades que podrían agravar el asma, incluido el reflujo gastroesofágico. Nuestro objetivo fue investigar si la broncoaspiración se produce en pacientes con asma y, de ser así, si se correlaciona con el control del asma.
MÉTODOS: para caracterizar el nivel del control de asma, a los pacientes se les administró el Cuestionario de Control de Asma 7 (ACQ-7), la medición de la fracción de óxido nítrico exhalado y una espirometría. Asimismo, se realizó una prueba de deglución de bario con provocación para evaluar la predisposición a la broncoaspiración y una broncoscopia, con lavado broncoalveolar (LBA) y niveles de pepsina como marcador de broncoaspiración.
RESULTADOS: se estudiaron 78 pacientes estratificados por gravedad de la enfermedad (Global Initiative for Asthma) en leves (35,8 %), moderados (21,7 %) y graves (42,3 %). La pepsina fue detectable en BAL en 46/78 (58,9 %). No hubo diferencias entre los niveles de pepsina en pacientes con diferente gravedad de la enfermedad. Además, no se observaron asociaciones significativas entre el nivel de pepsina y las medidas de control del asma, FEV1, ACQ-7 o frecuencia de exacerbación. De manera similar, no se encontraron asociaciones con los ajustes del historial de tabaquismo, el IMC, el uso de inhibidores de la bomba de protones, el recuento de eosinófilos o de IgE total. Cuando se estratificó en poblaciones asmáticas eosinofílicas o neutrófilas basándose en el LBA, no hubo relación con las concentraciones de pepsina detectadas. Un trago de bario positivo (observado en 33/60 pacientes) no se correlacionó con el nivel de pepsina del LBA y no se encontraron diferencias significativas entre el resultado del trago de bario y ACQ-7, Global Initiative for Asthma, frecuencia de exacerbación o FEV1 usando análisis univariados o multivariados.
CONCLUSIONES: este estudio sugiere que la importancia que se le da a la broncoaspiración en el control actual de los síntomas del asma y la tasa de exacerbación puede ser interpretada de forma exagerada. Sin embargo, este estudio no abordó el papel de la aspiración y el riesgo futuro de exacerbación.
